Efluvio telógeno estacional: por qué en primavera se cae más el cabello

¿Has notado que con la llegada de la primavera se te cae más el pelo de lo habitual? Esta situación es mucho más común de lo que parece y tiene un nombre: efluvio telógeno estacional, una de las causas más frecuentes de caída capilar en esta época del año.

Aunque puede generar cierta preocupación, el efluvio telógeno estacional es un proceso benigno, temporal y con buen pronóstico. En este artículo, te explicamos por qué ocurre, qué lo desencadena y cómo manejarlo de forma adecuada para mantener tu salud capilar bajo control.

¿Qué es el efluvio telógeno estacional?

El efluvio telógeno es una alteración del ciclo de crecimiento del cabello en la que un número elevado de folículos pilosos entra prematuramente en la fase de reposo o caída (fase telógena). Esto provoca una pérdida de cabello más difusa y abundante, especialmente visible al lavarlo o peinarlo.

El ciclo capilar normal consta de tres fases:

• Anágena (crecimiento): puede durar entre 2 y 6 años.
• Catágena (transición): etapa breve entre 2 y 3 semanas.
• Telógena (reposo y caída): dura unos 3 meses.

En condiciones normales, entre un 10 % y un 15 % del cabello se encuentra en fase telógena. Sin embargo, en el efluvio telógeno estacional, este porcentaje se incrementa, y como consecuencia, notamos una mayor caída capilar.

¿Por qué ocurre más en primavera?

Aunque aún no se conoce con total certeza la causa exacta del efluvio telógeno estacional, existen varias hipótesis respaldadas por la experiencia clínica y estudios recientes:

• Mayor exposición a la luz solar: el cambio en la fotoperiodicidad puede alterar los niveles de melatonina, lo que influye en el ritmo del ciclo folicular.
• Variaciones hormonales: ciertas hormonas como la prolactina pueden sufrir alteraciones durante el cambio de estación, afectando directamente al cuero cabelludo.
• Factores ambientales: la temperatura, la humedad y los cambios inmunológicos propios de la primavera también podrían influir.

Incluso se han observado patrones similares en otras especies mamíferas, lo que apunta a un mecanismo biológico evolutivo detrás de este fenómeno.

¿Hay que preocuparse?

En la mayoría de los casos, no. La caída provocada por el efluvio telógeno estacional es reversible y autolimitada. Lo habitual es que el cabello comience a recuperarse de forma espontánea en un plazo de 2 a 3 meses.

No obstante, si la caída es excesiva, prolongada o viene acompañada de otros síntomas, conviene realizar un diagnóstico médico.

Tratamiento y recomendaciones

El manejo del efluvio telógeno estacional se basa principalmente en el acompañamiento y el cuidado del paciente:

• Tranquilidad: es un proceso fisiológico y pasajero.
• Nutrición adecuada: una alimentación rica en hierro, zinc, biotina y vitaminas del grupo B ayuda a mantener el cabello saludable.
• Evitar agresiones externas: limitar el uso de planchas, secadores o recogidos muy tirantes.
• Tratamientos complementarios: opciones como la mesoterapia capilar con vitaminas o la bioestimulación con factores de crecimiento pueden acelerar la recuperación capilar y mejorar la calidad del nuevo cabello.

Conclusión

El efluvio telógeno estacional es una causa frecuente de caída de cabello durante la primavera. Aunque puede resultar alarmante, lo más habitual es que se resuelva de forma espontánea sin necesidad de tratamientos complejos.

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